“Me desvela el futuro de los profesionales frente al avance tecnológico”
Escribe: Humberto Bertazza. Presidente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Con motivo de su exposición en el salón Ábaco sobre “Reforma Tributaria. Modificaciones Ley de Procedimiento Fiscal y Nueva Ley Penal Tributaria”, conversamos con el Dr. Humberto Bertazza, presidente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que nuclea a 73.000 matriculados, más de la mitad de los colegas de todo el país. Desvelado por el futuro, la preparación de los jóvenes profesionales y al mando de una de las instituciones de mayor envergadura, Bertazza respondió a las inquietudes de Comunicándonos.
¿Cómo se dirige una institución tan grande?
Nuestro consejo es una institución muy compleja. Una organización muy dinámica con temas muy variados.
Apelamos a una estructura muy eficiente para sustentar el compromiso que tenemos a diario.
¿Las Comisiones de Enlace tienen protagonismo al estar cerca del poder que toma decisiones?
Sí, pero hay que decir que además de las Comisiones de Enlace, este gobierno, por sus características, es un gobierno que pide constantemente ayuda a entidades profesionales. Nosotros estamos colaborando muchísimo con el Gobierno Nacional. Por ejemplo, el Poder Ejecutivo firmó un decreto para modificar el Código Civil y Comercial, por lo que el Consejo desde el ámbito de nuestras competencias, estamos evaluando los temas en los que podemos emitir opinión, vamos a acercar nuestras ideas al respecto. En eso están trabajando varias comisiones, los peritos, los registros, el área societaria, el tema impositivo. Solamente, la colaboración con el Gobierno nos lleva gran parte de nuestros esfuerzos.
¿Que requerimientos son propios de los profesionales de CABA a diferencia de los del resto del país?
Comienzo por lo que nos iguala a todos: el funcionamiento razonable de la página web de la AFIP, si bien no tenemos un problema de conexión a Internet (como lo tienen matriculados de otros lugares del país), tenemos inconvenientes con la saturación del soporte. Tenemos profesionales que elevan quejas porque deben trabajar de madrugada para acceder a la web con el consiguiente perjuicio en sus honorarios. Este es un tema común a todos los matriculados del país, lo mismo que el cúmulo de tareas que AFIP pone en manos de los contribuyentes. Nosotros en particular tenemos un tema que nos complica (a diferencia del resto de las jurisdicciones) y es el tema de las legalizaciones.
Teníamos un sistema de legalización por cada presentación y su correspondiente pago de derechos; y como consecuencia del sistema de balance centralizado, estamos frente a un solo balance. Esto nos hizo modificar todo nuestro sistema, restringiendo un cúmulo de presentaciones a un solo pago, que termina siendo muy elevado, lo que genera inconvenientes con las empresas y los profesionales. Es un problema propio de Buenos Aires. Sé, por ejemplo, que Uds. están afrontando la vuelta al cobro indirecto, lo que me parece una muy buena medida para muchos matriculados a los que el Consejo Profesional les defiende sus derechos. No obstante, también sé que hay posiciones encontradas.
¿Qué lo desvela del perfil profesional?
Me desvela el futuro profesional, los cambios tecnológicos que vienen a gran velocidad. Me preocupa que el profesional no lo vea, que no interprete lo que va a venir porque los cambios que se avecinan son espectaculares.
Por ejemplo, ¿cuáles?
La AFIP hoy está trabajando ya con simulaciones del subdiario de venta de IVA. Esto significa que el organismo le va a dar al contribuyente el subdiario con el impacto del IVA en las ventas y el contribuyente dirá qué está bien y qué está mal. Me pregunto entonces, qué va a pasar con los estudios o contadores especializados sólo en hacer estos libros. Los que se dedican a liquidar sueldos y jornales que pasan a sistemas digitales o los que hacen teneduría de libros que también van a ser digitales; a estos colegas se les termina el negocio. Hoy se vislumbran una serie de tareas humanas que la robotización va a hacer desaparecer. Nuestra función como dirigentes es alertar a los matriculados sobre estos temas.
¿Se soluciona con capacitaciones?
Primero, como dirigentes tenemos la responsabilidad de abrir las cabezas y lograr que el matriculado entienda que debe agregar valor a sus servicios profesionales. Y para esto, debe cambiar su mentalidad, repensar cómo presta los servicios y para esto será fundamental que se capacite.
¿Cómo ve a los jóvenes profesionales?
La profesión de contador público ha dejado de tener glamour para los jóvenes, por lo tanto el chico que elige las ciencias económicas, se vuelca por carreras “más blandas“ como la Licenciatura en Administración, en Marketing o en Finanzas. Lo primero que se advierte es que cada vez son menos los ingresantes a la carrera de
Contador Público; y lo segundo que se vislumbra es el escaso compromiso laboral de los jóvenes en las empresas.
¿Está hablando de los “millennials”?
(generación del milenio)
Claro, pero antes de continuar quiero dejar en claro que sólo hago una descripción objetiva, si hay algo que defiendo en mi Consejo es a los jóvenes, por quienes tengo predilección, hemos incorporado muchos consejeros jóvenes, los apoyamos y los formamos. Esto no es una crítica, es sólo una descripción. Frente a esta realidad, hoy el desafío es nuestro.
Tenemos que evaluar qué plan de acción tenemos.
Es inminente, van a cambiar las relaciones laborales; mientras los de mi generación aspirábamos a trabajar toda la vida en un solo lugar, ahora, por ejemplo, los jóvenes eligen tener 20 empleadores. Buscan especializarse y ofrecer sus servicios a diferentes empresas: el multiempleo. Esto conlleva un cambio absoluto de las reglas.
¿Cómo ve a los jóvenes frente al compromiso dirgencial?
Con respecto al compromiso dirigencial lo veo en una escasísima proporción. En general, a los más chicos no les interesa, por eso cuesta tanto conseguir gente joven que quiera iniciarse en la carrera política dirigencial. Aquí hay un verdadero desafío.
Nosotros tenemos la obligación de motivar a los más chicos para sumarse a esta tarea.