Colegas:
Hoy me toca la responsabilidad de comunicarme con los matriculados desde este espacio editorial. Y quiero aprovechar esta oportunidad de llegar al escritorio de cada uno de ustedes para comentarles sobre un tema que entiendo, debe ocupar nuestra atención. Lo hago en el convencimiento de que como profesionales de las ciencias económicas tenemos que colaborar para tener una sociedad más justa. Tenemos responsabilidad en eso. Joan Antoni Melé es fundador de la empresa Taller de Conciencia, miembro del Consejo Asesor de Triodos Bank, asesor de la Cámara de Emprendedores y Empresarios de Cataluña y promotor de la banca ética en España y América Latina. Un hombre que vale la pena escuchar y leer.

Según el último informe económico de Davos, el 1% de la población mundial acumula más riqueza que todo el 99% restante. Y esto no puede parecernos normal, no es tolerable. Melé propone repensarnos como ser humano. Nunca antes como ahora habíamos tenido tantos recursos científicos, técnicos, riquezas y avances tecnológicos, sin embargo nunca antes hemos tenido tantos conflictos como en estos tiempos. "Creo que hemos perdido en el camino la dignidad humana", dice Melé, "hemos olvidado lo que es ser humano, enfocados en el dinero, en el crecimiento, en los negocios".

Ahí luchamos, más bien parecidos a los animales sin poner nuestro diferencial humano, ese que brilla en el arte, no llevamos nuestra creatividad a la economía.

El autor propone -y en eso coincido- ser sostenibles como obligación moral, aunque no sea tan rentable. Hoy nos desvela crecer y se puede crecer cuando somos pequeños; cuando somos grandes, ya no hay necesidad de crecer más. Melé hace una comparación que me parece contundente:

"Cuando en nuestro cuerpo, un grupo de células crece más de la cuenta sin contemplar el cuerpo que las contiene, a esto se le llama cáncer. En este organismo mundial en el que estamos todos no podemos crecer más, no podemos ni tiene sentido, reporta un problema al resto del mundo' Esto sólo se modifica con educación, pero no mejorando los índices de las evaluaciones Pisa, que desarrolla la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Ahí no se miden la capacidad creativa, la poesía, el compromiso con el otro. Hoy hay que educar en valores. Hay que contemplar los valores humanos como verdadero pilar del éxito personal y profesional. Y en este punto, Joan Antoni Melé, transmite un mensaje urgente para los más jóvenes: "No son sujetos pasivos de la situación complicada que vivimos; tienen el poder y la capacidad de cambiar el rumbo de la economía y la sociedad".

Hoy en el mundo, hay empresas que tuvieron el coraje de cambiar esto; por ejemplo, la banca ética, un emprendimiento que llevó adelante el propio Melé. Un banco que define los criterios con los que va a invertir teniendo en cuenta si los proyectos respetan el ambiente y las personas, con transparencia. "Los bancos no tienen dinero", señala Melé, "tienen nuestro dinero. Y los clientes tienen el derecho y la responsabilidad de saber cómo se gestionan nuestros recursos".

El mundo de hoy nos demanda ser auténticamente sostenibles, en todos los aspectos de nuestras vidas, y como profesionales de las Ciencias Económicas, nuestro deber es mirar al más vulnerable. Está viniendo un tsunami de conciencia, autenticidad, ética y coherencia; mientras, algunos están haciéndose una selfie.
Lo pensemos.
Hasta la próxima.
Cr. Marcelo Aguilera
Tesorero