Estimados colegas
En esta oportunidad tengo el honor y el agrado de poder expresarme a través de estas líneas, y transmitirles un pensamiento que sintetiza el conjunto de ideas de todo un equipo de trabajo conformado por los profesionales que tenemos la enorme responsabilidad y compromiso asumido con nuestro Consejo Profesional y con la comunidad, de defender no sólo el ejercicio de la profesión, sino también de brindar un trabajo honesto y altamente profesional.

La necesidad de formación y capacitación permanente se ha incrementado en los últimos años como consecuencia, fundamentalmente, de los cambios en las condiciones de competitividad de las economías, de la innovación técnica y tecnológica, de los procesos productivos y de la mejora de la calidad de servicios. Estos cambios han sido profundos para nuestra profesión, ya que nos movemos en un contexto en el cual se observan problemas de creciente complejidad, tanto en el plano jurídico, como tributario y económico, entre otros.

El principal objetivo y la mayor aspiración que persigue nuestro Consejo Profesional es que nuestros colegas se desempeñen exitosamente en el mercado laboral, cualquiera sea su especialidad; trabajamos en ello.

Se han diseñado y creado distintas comisiones técnicas, de trabajo, se fomenta la asistencia a Congresos y se organiza permanentemente el dictado de cursos para abarcar la gran cantidad de temas que son de incumbencia e interés de los profesionales en ciencias económicas; los que, cabe recalcar, tienen el carácter de gratuitos para quienes tienen su cuota de Derecho de Ejercicio Profesional al día.

Todo esto responde y tiene como objetivo la obtención de una capacitación, que, desde distintos enfoques -teóricos y prácticos- faciliten el desempeño eficaz, eficiente y responsable de la profesión.

El Consejo Directivo así lo entiende y es por ello que pone a disposición de sus matriculados, todas las herramientas y medios necesarios para jerarquizar la profesión.

Para finalizar, permítanme recordar, citando a Aristóteles que aseveraba: “lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama”, sosteniendo también que “sólo hay felicidad donde hay virtud y esfuerzo serio, pues la vida no es un juego”.

Virtud y esfuerzo.

Cr. Dante Daniel Amador

Vicepresidente 2º