Economía y elecciones 2015
Escribe: Juan Lucas Dapena Fernández. Doctor en Ciencias Económicas. Miembro del CICES
Estamos a principio de julio y se respira una cierta tranquilidad desde el punto de vista económico en la Argentina. Como hechos importantes se destacan una des aceleración de la inflación, una relativa calma en la cotización del dólar (salvo estas últimas semanas) y una economía quieta en la cual no parecería que se vaya a producir ningún evento importante al menos hasta las elecciones.
¿Esto significaría que estamos en un buen momento económico? No necesariamente. Lo que sí se puede afirmar es que la economía en general se encuentra en un momento de pausa hasta que se definan las elecciones y las potenciales medidas económicas que se tomarán a futuro y signarán los próximos años en Argentina.
El hecho de que se haya desacelerado la inflación se debe principalmente al ajuste producido en los salarios de los empleados como consecuencia de que no se cerraron la mayoría de las paritarias a principio de año. Entonces, con los precios subiendo, y los salarios todavía en valores del 2014, las familias consumen menos como consecuencia de tener menos dinero en los bolsillos. Esto es lo que ha potenciado el “parate” económico, la desaceleración de los precios y por ende de la inflación (se estima ahora que rondará entre el 25% y 28% este año). Elaboración propia en base a datos del INDEC e Índice del Congreso. Se incorporó el IPCNu (Índice de Precios al Consumidor Nacional Urbano), que mide las variaciones de los precios del consumo final de los hogares.
Por otro lado, el Estado ha continuado incrementando el gasto a un ritmo del 35% - 40%. Con esto queda claro que el ajuste sobre los salarios es lo que desacelera los precios dado que el Estado no ha disminuido su gasto (potenciando el déficit). Gasto en el cual existen numerosos ejemplos de subsidios mal asignados (el ejemplo clásico de la electricidad subsidiada en Capital Federal, el transporte en Buenos Aires, etc.).
Por el lado del dólar, la relativa calma se debe a que los agentes económicos saben que el Estado Nacional posee los dólares necesarios para afrontar los compromisos hasta fin de año. No obstante, la subida del dólar “blue” producida en este último tiempo se debería a dos factores, el primero la designación de Zannini como candidato a vicepresidente en la lista encabezada por Scioli, esto ha llevado a dolarizar tenencias en pesos debido a que no se esperarían grandes cambios en el caso que oficialismo gane las elecciones. Por otro lado, la mayor disponibilidad de efectivo en la calle por
la acreditación de las primeras paritarias y el aguinaldo a numerosos empleados, lo que permite contar con más dinero en efectivo que se estaría volcando a este mercado (también ha subido la cantidad de dólares adquiridos mediante la modalidad de dólar ahorro permitida por la Afip).
El “parate” económico que se viene evidenciando ya desde hace bastante tiempo (la industria ha caído por 22 meses seguidos) se debería a varios motivos, entre los cuales la ya mencionada menor cantidad de dinero por parte de la población por no haber arreglado paritarias, la inflación, la necesidad de impedir importaciones para tener una mayor disponibilidad de dólares (muchas empresas no pueden adquirir insumos importados para sus líneas de producción porque no le autorizan las importaciones, lo que lleva a disminuir e incluso parar ciertas producciones) y, por último, la incertidumbre sobre cómo seguirá la economía en el futuro que repercute en potenciales inversiones y gastos.
Si bien se entendía que tanto Macri como Scioli iban a ser más pro-mercado, la designación de Zannini en la lista de Scioli lleva a pensar que la lista oficialista no va a cambiar el manejo de la economía.
¿Como sigue todo?
En esta segunda mitad del 2015 va a haber más dinero en la calle, lo que va a llevar a un mayor consumo y también a una mayor inflación.
La demora en cerrar paritarias (recién están cerrando) permite a partir de ahoraque los empleados se encuentren con mayor dinero en los bolsillos, lo que llevaría a aumentar el consumo y generar
un bienestar económico antes de las elecciones.
El dólar oficial seguirá una suba lenta y previsible mientras que el dólar blue se moverá al ritmo de las expectativas que vayan surgiendo relacionadas a quien será el futuro presidente y qué grado de libertad tendrá para solucionar los problemas económicos existentes. Un dólar oficial a $9,15 no es sustentable en el futuro dado que deja al país sin posibilidades de colocar las exportaciones en el exterior por falta de competitividad.
Si bien no es esperable un cambio de gobierno con traumas en la economía, existen varios problemas de fondo que es necesario solucionar para poder crecer en forma genuina, entre los cuales
se puede mencionar el cepo cambiario, la falta de confianza, la inflación, la pobreza, el déficit, la competitividad de las economías regionales y los problemas en precios relativos. Hay que ver cómo
se solucionarán.